Entre los vestigios de muerte...alardeabas ser la más libre.
Pero libres son los pájaros, no las ánimas que andan reptando.
Mis ojos en tus ojos, negros y chispeantes,
se hundieron en tu constelación, andaba perdida.
Filtros, películas y agradable música depresiva, desconocidas.
Conocí tu lengua saturnina.
Pero saturno no lastima.